El movimiento de contenedores TEU en el sistema portuario nacional cayó 1,3% durante el primer cuatrimestre de 2023, con respecto al año pasado. Factores externos, como la pérdida de apetito por el comercio, están afectando la actividad. El movimiento de carga en toneladas métricas disminuyó 2,2%.
La guerra Rusia-Ucrania, la falta de apetito en el comercio mundial, la inflación, la pérdida de valor de las monedas al cambio del dólar americano son factores externos que están golpeando el movimiento de contenedores en el sistema portuario nacional.
De enero a abril de 2023, el movimiento de contenedores TEU en el sistema portuario nacional cayó 1,3%, comparado con el mismo periodo de 2022, según los indicadores preliminares de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP).
Durante los cuatro meses que van de 2023, el volumen total de la actividad alcanzó los 2.647.686 contenedores TEU, comparado con los 2.681.578 de 2022, lo que equivale a 33.892 movimientos menos para lo que va del presente año.
En Bocas Fruit Co. el movimiento de contenedores se redujo -16,1%; por su parte en Colón Container Terminal aumentó 7,1%; en Manzanillo International Terminal cayó 4,5%; en Panamá Ports Company – Balboa disminuyó 1,2%; en Panamá Ports Company – Cristóbal incrementó 3,8%, y en PSA Panamá International Terminal cayó -5,4%.
“De enero a abril de 2023 el movimiento de contenedores TEU en el sistema portuario nacional cayó 1,3%, comparado con el mismo periodo de 2022, según los indicadores preliminares de la Autoridad Marítima de Panamá. Durante los cuatro meses que van de 2023, el volumen total de la actividad alcanzó los 2.647.686 contenedores TEU, comparado con los 2.681.578 de 2022”.
Las cifras reportadas están muy distantes de los números obtenidos en 2021 (2.813.168) cuando todavía el mundo estaba en crisis por la pandemia de la covid-19. A abril de 2021 la actividad se situó en 28,3%.
“A nivel global hay una desaceleración marcada en el movimiento de carga. Muchos estamos comprando menos que el año pasado, lo cual es una representación del consumidor a nivel global. Si tú compras menos, las tiendas que venden compran menos; y si ellas compran menos, ordenan menos, y vemos menos contenedores. Esa es la variable”, comentó a La Estrella de Panamá el vicepresidente de Mercadeo y Asuntos Corporativos de Manzanillo International Terminal – Panamá, S.A., Juan Carlos Croston.
Indicó que entonces “hay que esperar cómo se soluciona el tema de la inflación, los cambios de monedas, porque toda la crisis que hay en el entorno internacional está impactando el movimiento de carga en los puertos”. Mencionó que, por ejemplo, en Colombia los ciudadanos están padeciendo por la devaluación de la moneda local (el peso colombiano) frente a la tasa de cambio del dólar estadounidense. “Los colombianos están sufriendo porque su moneda local llegó casi a 5.000 pesos el dólar y eso les incrementa el costo de vida, y si tienen un costo de vida más caro, no van a comprar nada”, expresó Croston. Insistió en que se tiene que ver cómo todos esos aspectos se estabilizan para que las personas se sientan más cómodas, ordenen más cosas y compren más. Croston destacó que en Manzanillo, por ejemplo, el año pasado terminaron 3% por debajo de 2021, y este año hasta mayo de 2023 están entre 3% y 4% por debajo de 2022.
“La tendencia a la baja se está dando en todos los demás puertos. Todo lo que es puerto de transbordo está viendo una baja en la carga. Todos los renglones están siendo impactados”, aseguró Croston. Hasta abril de 2023, el movimiento de carga en toneladas métricas registró una disminución acumulada de 2,2%, comparado con el 27,4% reportado en 2021. Por su parte, el movimiento de vehículos registró una variación acumulada de 24,6% (42,4% en igual periodo del año pasado); el movimiento de pasajeros de cruceros reportó 100% (100% el año pasado) y el movimiento de pasajeros doméstico en puertos nacionales 14,8% (204,7%), según datos de la AMP.
Perspectivas
Con respecto a las perspectivas de final de año para Panamá, Croston dijo que eso depende, porque hay cosas que no controlan, como por ejemplo, citó el tema del agua en el Canal. “Eso no es bueno para el Canal porque trae oportunidades”, comentó Croston, señalando que ya hay navieras que han comenzado a traer los barcos llenos porque para ellos es una pérdida de espacio no traerlos repletos. “Descargan los contenedores que tienen que descargar en Balboa para hacer entonces el calado. Ponte que venían con 50 pies de calado que es el máximo, descargan para llegar a los 44 o 45 pies que tiene el límite del Canal ahora mismo. Transitan y entonces del otro lado montan de nuevo los contenedores que descargaron en Balboa y que movieron por tren o carril”, puntualizó.
Según una publicación de Mundo Marítimo, el comercio de contenedores en las rutas marítimas cruciales de Asia a América del Norte disminuyó un 26% durante el primer trimestre de este año comparado con el mismo periodo del año anterior, pero si se comparan las cifras actuales con respecto a igual periodo de 2019, hay un aumento de un dígito.
En cuanto a las perspectivas 2019 versus 2023 para América Latina, los flujos pueden bajar en comparación con el periodo anterior, pero mejores que 2019. Sin embargo, advirtió que hay otros factores que afectan la carga en América Latina, principalmente en las exportaciones, como el impacto de las condiciones climáticas y sus efectos sobre las cosechas, los coletazos de las restricciones y sanciones a la carga rusa de granos y combustible, que impulsan solicitud de volúmenes, y el creciente mercado de la electrificación que demanda cobre y litio.
Las importaciones, por su lado, se verían mayormente afectadas por la restricción en el consumo debido a la alta inflación.
De acuerdo con el Índice de Transporte Marítimo de Xeneta “con la caída de la demanda de exportaciones en contenedores desde el lejano oriente y la falta de apetito por las importaciones en EE.UU., hay algo así como un ‘retroceso’ en las dos fuerzas que tradicionalmente impulsan el crecimiento del comercio mundial”, por lo que “hay muy poco que los transportistas puedan hacer para proteger sus preciadas tarifas a largo plazo en este tipo de clima, especialmente si tenemos en cuenta que los buques encargados durante el boom de la pandemia están empezando ahora a engrosar la capacidad global del sector”.
Hace poco, en una entrevista con este diario, el experto del mundo marítimo de Panamá Julio De La Lastra llamó al gobierno y al sector privado a abrir los ojos, porque “nos dormimos en los laureles y hemos perdido hegemonía en temas de atraque portuario”. Destacó que líneas navieras enteras, servicios de diferentes navieras se han ido a Colombia porque los puertos de Panamá les están resultado “más caros” para movilizar contenedores completos de un lugar a otro por vía marítima.
De hecho, la tercera edición del Índice de Desempeño de los Puertos de Contenedores (CPPI), elaborado por el Banco Mundial y la Unidad de Inteligencia de Mercados de S&P Global, ubicó al puerto colombiano de Cartagena en el puesto número 5 del ranking de 348 puertos de contenedores mundiales evaluados, superando a los analizados en Panamá: Balboa está de número 76, Colón de 81 y Cristóbal de 305.