Álvaro Vargas, presidente de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic) señaló que este año los productores se vieron incentivados a sembrar y por ende compraron más insumos agrícolas, tomando de referencia los pronósticos de buen invierno.
Por Mabel Calero
Publicado 15 de diciembre de 2020 12:00 AM
Pese al impacto que tuvo la pandemia en la economía de Nicaragua, la importación de insumos agropecuarios ha mejorado con respecto al año pasado, según cifras del Banco Central de Nicaragua, que muestra aumento tanto en volumen como en valor de estos productos que son utilizados en el campo y que coincide con el crecimiento que la agricultura aún sostiene hasta septiembre de este año. Entre enero y septiembre de este año, los productores nicaragüenses han pagado 243 millones de dólares en insumos agropecuarios, mientras que el año pasado para la misma fecha ueron 199.9 millones de dólares, lo que implica un crecimiento del 22 por ciento.
En volumen se importó 78 toneladas más con respecto a igual lapso del año pasado. Los productores importan frecuentemente: fertilizantes, urea, insecticidas, semillas, medicamentos veterinarios, sulfatos de potasio y calcio.
Uno de los insumos más usado para la producción son los insecticidas. Hasta septiembre de este año las compras en valor por este concepto ascendieron a 26.7 millones de dólares, mientras que en el 2019 fueron 20.6 millones de dólares, lo que significa un aumento del 29 por ciento.
En el caso de la urea, un fertilizante de bajo costo, se pagó a los mercados internacionales 27 millones de dólares, tres millones más que el año pasado. Este fertilizante es importante por la alta concentración de nutrientes.
De igual forma en el mismo lapso antes mencionado se compró 71 millones de dólares en agroquímicos, superior a los 46 millones del año pasado. Este insumo es vital porque previene y controla cualquier plaga de origen animal o vegetal durante la producción. Cabe destacar que el año pasado las ventas de fertilizantes y agroquímicos cayeron fuertemente, debido al incremento que provocó la reforma fiscal aprobada en febrero de ese año, luego que el Gobierno endureciera su política de exoneraciones para estos insumos.
Álvaro Vargas, presidente de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic) señaló que este año los productores se vieron incentivados a sembrar y por ende compraron más insumos agrícolas, tomando de referencia los pronósticos de buen invierno.
«Uno de los pocos sectores que aún sigue creciendo es el sector agropecuario y producto del pronóstico de buen invierno, que se pasó de bueno, las áreas de siembra incrementaron y eso provocó el aumento en la compra de insumos», dijo Vargas. No obstante el líder del sector señaló que eso no implica que el sector esté bien, puesto que los productores siembran para sobrevivir y no han estado invirtiendo en la finca, ni en compra de maquinarias agrícolas.
«No hay inversiones nuevas en las fincas y solo se está reparando la maquinaria, porque no hay dinero, solo hay para pagar y comer, esa es la realidad», dijo Vargas.
De hecho este año la siembra de primera tuvo buenos resultados, sin embargo en postrera hubo afectación en las plantaciones por el paso de los huracanes Eta e lota, que en algunas zonas provocó la pérdida de hasta del 70 por ciento de la producción de frijoles. Según el Banco Central, al tercer trimestre de este año la agricultura crece 3.5 por ciento, tras experimentar una expansión entre julio y septiembre de 5.4 por ciento. Esto debido a mayor generación de valor agregado en los cultivos de banano, mani, café y arroz, entre otros.
Contracción de la cartera agrícola
Datos de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif) indican que la cartera agrícola hasta septiembre incrementó 6.2 por ciento, con respecto al mismo lapso de 2019. En términos absolutos, esta cartera creció en 738 millones de córdobas. No obstante, el número de préstamos se redujo y pasó de 1 5,075 a 11 ,382.
Por su parte, la cartera ganadera sufrió una caída de 17.5 por ciento, al pasar de 2.66 millones a 2.19 millones de córdobas. La reforma a la Ley de Concertación Tributaria ocasionó el año pasado que ahora los productores tengan mayores trabas para exonerar sus compras de insumos agropecuarios, pero además se quitó de la lista de productos exentos de impuestos, las maquinarias agrícolas.